8 Beneficios de hacer yoga en casa
- Reducir su presión arterial y su frecuencia cardíaca.
- Ayudarle a relajarse.
- Mejorar su confianza en usted mismo.
- Reducir el estrés.
- Mejorar su coordinación.
- Mejorar su concentración.
- Ayudarle a dormir mejor.
- Ayudar a la digestión.
Un estudio reciente sugiere que la frecuencia y la duración de la práctica en casa pueden ser la clave para cosechar los mayores beneficios de hacerlo regularmente.
Para este estudio, los investigadores distribuyeron encuestas anónimas entre 4.307 participantes seleccionados al azar extraídas de 18.160 practicantes del método de Yoga Iyengar en 15 estudios de este tipo en los Estados Unidos.
Los investigadores midieron las dimensiones del bienestar físico, conductual y psicológico de cada uno de los participantes anónimos.
Sus hallazgos fueron sorprendentes. No les importó, en general, cuánto tiempo habían practicado anteriormente los participantes, sino más bien la frecuencia y el tiempo total practicado de manera regular.
La práctica de yoga en casa, si consta de asanas, meditación, pranayama, o meditación resultó ser un factor positivo de gran relevancia en muchos aspectos de la salud, mientras que la asistencia a clase o no no lo era. Las mejoras de quienes hacen yoga en casa incluyen mayor atención en los movimientos, más bienestar subjetivo, mayor consumo de frutas / consumo de verduras diario, reducción de las alteraciones del sueño, mejora en el Índice de Masa Corporal (IMC) y reducción de la fatiga. Los más propensos a practicar yoga en casa eran también más propensos a practicar una gama más amplia de prácticas de este ejercicio.
Debido a su diseño transversal, el estudio no sugiere que la práctica en casa sea necesariamente más beneficiosa que la práctica de clase. Por ejemplo, puede ser que las personas con más probabilidades de practicar más a gusto en su estudio también tuvieron más auto-motivación, atención, etc, en un primer momento, lo que les ayudó a practicar también en casa y perfeccionarse. Sin embargo, podemos suponer igualmente que la práctica en casa puede haber promovido estas cualidades. Por tanto, la investigación futura debería investigar estas relaciones a través del tiempo.
¿Qué tipos de estilos existen?

Existen muchos tipos o estilos distintos de yoga. Estos varían de leves a más intensos. Algunos de los estilos más populares de yoga son:
- Ashtanga o yoga de poder. Este tipo de yoga ofrece un ejercicio más exigente. En estas clases, usted se mueve rápidamente de una postura a otra.
- Bikram o yoga caliente. Usted hace una serie de 26 poses en una habitación con una temperatura entre 95°F y 100°F (35°C y 37.8°C). El objetivo es calentar y estirar los músculos, ligamentos y tendones, y purificar el cuerpo a través del sudor.
- Hatha yoga. En ocasiones, este se utiliza como un término general para el yoga. Normalmente incluye tanto respiración como posturas.
- Integral. Un tipo suave de yoga que puede incluir ejercicios de respiración, cánticos y meditación.
- Iyengar. Un estilo que pone mucha atención a la alineación precisa del cuerpo. También puede mantener las posturas por períodos prolongados de tiempo.
- Kundalini. Enfatiza los efectos de la respiración sobre las posturas. El objetivo es liberar la energía de la parte inferior del cuerpo de manera que pueda trasladarse hacia arriba.
- Viniyoga. Este estilo adapta posturas a las necesidades y habilidades de cada persona, y coordina la respiración y las posturas.
Puedes ver más información aquí:
https://medlineplus.gov/spanish/ency/patientinstructions/000876.htm
¿Cómo comenzar?

Busque clases en su gimnasio, centro de salud o estudio de yoga local. Si usted recién comenzará a practicar, empiece con una clase para principiantes. Hable con el instructor antes de la clase e infórmele sobre cualquier lesión o afección que usted pueda tener.
Es posible que desee preguntar sobre la experiencia y el entrenamiento del instructor. Sin embargo, si bien la mayoría de los instructores ha tenido algo de capacitación formal, no existen los programas de entrenamiento de yoga certificados. Elija a un instructor con el que disfrute trabajar que no le exija de maneras que lo hagan sentir incómodo.
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